La calidad de la gestión se refleja en declaraciones de los jefes. Una nota de prensa señala que algunos empleados de Agroisleña "están insubordinados". El autor de las declaraciones aún no se ha dado cuenta de la diferencia entre un cuartel y una empresa. CAVIDEA alza su voz de protesta y le recuerda al gobierno que hace algún tiempo le propuso un plan para mejorar la producción a través de acuerdos entre el sector público y el privado. El gobierno los ignoró y hoy los consumidores, productores y agroindustrias sufren los resultados. Ya no están solos, los acompañan empresas como Agroisleña y Owens-Illinois. ¿Cuál será la próxima?
De la calidad de algunos productos ya los consumidores tienen evidencia de ello, basta tomar un poquito de café, observar el color de algunos cortes de carne importada o sentir en el paladar el desagradable y seboso sabor de los pollos gordos que vienen del exterior. Por cierto los productores de café siguen protestando por el congelamiento del precio y si de protestas se trata, de Anzoátegui también vienen algunas, por las obras inconclusas de establecimientos vinculados a la cadena pesquera. También hay protestas por la importación de arroz y los precios al productor de la carne y el maíz, otras por la regulación del pan que ya lleva muchos meses sin ajuste de precios. Por otra parte la producción de pescado sigue declinando y entre capturas y acuicultura, el tonelaje es de apenas el 50% de lo que llegó a ser hace unos años.
También hay protestas en Quibor, Tiznados, Guárico y localidades de Portuguesa, estas corresponden a productores. Al final, la insatisfacción no sólo alcanza a los consumidores que pagan caro y no encuentran lo que desean, sino también a FEDENAGA, FEDEAGRO, CAVIDEA, FEDECAMARAS y muchas asociaciones regionales o locales de productores. Escuchamos hace unos días las quejas de un productor de pollos (hasta ahora uno de los pocos productos cuyo tonelaje había aumentado). La ruta socialista de la alimentación tiene el mismo matiz de la correspondiente al cemento, las cabillas, el aluminio, las válvulas, la construcción, la educación y el sistema público de salud, amen del Metro, los huecos en las calles y la acumulación de basura. Esto determina que también el Colegio de Ingenieros, los abogados y los médicos estén protestando continuamente. Las protestas vienen también desde adentro y ya no es raro encontrar artículos críticos en la página WEB "Aporrea".
A pesar de esta colección de fracasos, el gobierno, en su política de agresión ambiental y contraria a cualquier lógica, aspira "rescatar" en el 2011 otras 450.000 hectáreas. Ignoramos porque ha sido colocada una partida en el presupuesto si nunca pagan las fincas. La deuda por expropiaciones crece y ya pasa de 20.000 millones de dólares. Esta cifra, hace pocos años, era la totalidad del presupuesto nacional. Cuando el productor agrícola Franklin Brito murió a consecuencias de la huelga de hambre, no hubo días de luto, ni discursos oficialistas, apenas un gran silencio.
¿Qué haremos cuando quede vacío el cofre del tesoro?